Bakú (Azerbaiyán), 16 de noviembre de 2024 – La ministra de Ambiente de Colombia, Susana Muhamad, reafirmó su compromiso con el Tratado de sobre Combustibles Fósiles, en la COP29, denominado como ‘Tratado de No Proliferación de Combustibles Fósiles’ durante una rueda de prensa que reunió a líderes globales en la materia. La ministra destacó los avances logrados por la iniciativa, que ya cuenta con el respaldo de 14 países y avanza hacia nuevas fases de movilización política a nivel internacional.
Muhamad resaltó la importancia de situar a las personas en el centro de la transición energética para evitar la polarización social y política que obstaculiza las soluciones climáticas. “La falsa dicotomía entre justicia social y ambiente está siendo explotada por discursos autoritarios que niegan la crisis climática. Este tratado busca cambiar esa narrativa y promover una transición justa que no deje a nadie atrás”, afirmó.
Durante la COP29, la ministra de Ambiente de Colombia, Susana Muhamad, reafirmó el compromiso del país con el Tratado de No Proliferación de Combustibles Fósiles, destacando el apoyo de 14 países y el avance hacia nuevas fases de movilización política internacional.
La ministra subrayó que, a pesar de los avances, la transición energética global sigue siendo desigual. “Mientras en un país como Bélgica se expande la energía solar, en África millones de personas carecen de acceso a la electricidad. Esto no solo es una injusticia climática, sino un terreno fértil para el populismo y el negacionismo. Necesitamos un nuevo pacto económico global que priorice la financiación climática y fomente una transición justa para los países en desarrollo”, añadió Muhamad.
La ministra también comentó sobre la ausencia de la delegación argentina, diciendo: “Es preocupante que no puedan participar en este foro, donde todas las naciones deben poder debatir y negociar. Su ausencia refleja la negación del problema y la defensa de un modelo económico que beneficia a los poderosos. Este tratado promueve un proceso multilateral para una transición energética justa”.
Expertos respaldan el Tratado sobre Combustibles Fósiles
La Dra. María Neira, directora del Departamento de Salud Pública y Ambiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), respaldó la posición de la ministra frente al tratado sobre combustibles fósiles, al enfatizar los impactos de estos en la salud pública. Según Neira, la crisis climática también es una crisis sanitaria, con siete millones de muertes prematuras cada año vinculadas a la contaminación del aire. “En algunas ciudades, las personas respiran aire con 400 microgramos por metro cúbico de partículas PM 2,5, cuando la OMS recomienda un máximo de cinco. Nuestros pulmones están pagando el precio de los combustibles fósiles”, advirtió.
Además, la funcionaria de la OMS destacó la urgencia de acelerar la transición hacia energías limpias. “El costo económico de no actuar ya lo están absorbiendo los sistemas de salud en todo el mundo. Este no es solo un problema ambiental, es una cuestión de vida o muerte”, concluyó.
La OMS apoya el compromiso de Colombia. La Dra. María Neira, directora del Departamento de Salud Pública y Ambiente de la OMS, resaltó la conexión crítica entre la eliminación de combustibles fósiles y la mejora de la salud pública global.
El encuentro también incluyó intervenciones de otros líderes y expertos que reforzaron la necesidad de abordar la crisis climática mediante un marco multilateral. Harjeet Singh, director de Compromiso Global de la iniciativa del tratado, afirmó: “El liderazgo de los países en desarrollo y las comunidades indígenas es clave para enfrentar esta emergencia climática”. Por su parte, Jwala Rambarran, experto en finanzas sostenibles, hizo un llamado a reformar la arquitectura financiera global para facilitar una transición justa, señalando que “el Sur Global no puede cargar con el costo de una crisis que no creó. La transición justa no es un lujo, es una necesidad para evitar que las comunidades más vulnerables queden atrás.”
Colombia, como uno de los países líderes de esta iniciativa, continuará abogando por resoluciones en la Asamblea General de la ONU y otros foros internacionales para impulsar la adopción del tratado sobre combustibles fósiles y asegurar que el Acuerdo de París sea una herramienta efectiva en la lucha contra el cambio climático.